Maximiza tus ganancias: consejos para reformar locales antes de vender

¿Tienes un local comercial en propiedad que quieres vender? Una de las primeras cuestiones que debes plantearte es la de si te interesa más venderlo para reformar o reformado. Para tomar la mejor decisión, debes calcular el potencial de revalorización tras la reforma, es decir, el coste de la obra y cuánto va a valer el inmueble tras la misma.

No existe un porcentaje concreto de beneficio que se pueda aplicar por igual en todos los casos, ya que cada local comercial es un mundo y cada reforma también. Si crees que realmente merece la pena hacer la reforma, hay una serie de consejos que debes tener en cuenta.

Licencias y permisos

Es imprescindible que conozcas la normativa vigente para locales comerciales del municipio donde se encuentre el inmueble. Para ello, debes dirigirte al Departamento Urbanístico del Ayuntamiento. La licencia de obras es indispensable para poder realizar la reforma. En función del tipo de obra que vayas a llevar a cabo necesitarás una licencia de obra mayor o una licencia de obra menor.

Se considera obra mayor aquella que afecta a la estructura o a los alimentos comunes del edificio donde está situado el local. Mientras, la obra menor es aquella que se caracteriza por una mayor sencillez a nivel constructivo y técnico, como la renovación de ventanas, la supresión de barreras arquitectónicas, la instalación de calefacción o el cambio de suelos.

¿Cómo reformar un local comercial?

Antes de iniciar cualquier reforma del inmueble, es esencial que un arquitecto realice un plano del mismo y elabore un informe técnico de las condiciones en las que se encuentra. Además, este experto también puede darte ideas en relación a los materiales a utilizar o a la mejor manera de distribuir el espacio, por ejemplo.

Solicita presupuesto a varias empresas de reformas y durante el proceso de decisión no te fijes única y exclusivamente en el precio. Aunque este debe ser un factor de peso, también debes evaluar otro como la experiencia de quienes van a hacer la obra, las referencias que tengas de la compañía y la calidad de los materiales. Debes asegurarte de que la empresa a la que contrates la reforma del local comercial es competente.

Si quieres maximizar tus ganancias reformando el local para venderlo, debes prestar especial atención a la fachada ya que es lo primero que van a ver los posibles compradores. Una cristalera que muestre el interior resulta muy atractiva para la gran mayoría de negocios. A la hora de hacer las fotografías y gestionar las visitas, el escaparate debe estar limpio y organizado

Una vez en el interior, los interesados en el inmueble deben llevarse la mejor impresión. Piensa muy bien cómo vas a distribuir los espacios. Debes formar un conjunto con sentido, decidiendo dónde quieres colocar cada elemento. Para captar la atención del mayor número de compradores posible, la decoración debe ser neutra e impersonal. El color blanco es un gran aliado, ya que transmite sensación de amplitud, limpieza y luminosidad.

Hay varios apartados que debes tener en cuenta, y uno de los más relevantes es la electricidad, clave para garantizar la seguridad del inmueble ante posibles cortocircuitos o averías. Contrata a un electricista que revise la instalación y recomiende las mejoras oportunas.

Y, por último, recuerda que para vender el local una vez hecha la reforma, hay algunos documentos que necesitas: nota simple del Registro de la Propiedad, certificado de Eficiencia Energética, último recibo del IBI, estatutos de la comunidad de propietarios y planos del local comercial.